
En medio de una tormenta financiera que ha sacudido sus cimientos, el Deportivo Pereira respira aliviado gracias a inyecciones económicas de patrocinadores locales que buscan salvar al club de un colapso inminente. El equipo matecaña, que ha jugado sus últimos compromisos con juveniles por el paro de la nómina profesional, recibe ahora apoyo directo para pagar salarios adeudados y levantar sanciones del Ministerio del Trabajo, permitiendo un cierre digno del segundo semestre de la liga.
El gerente general, Alejandro Rendón, reveló que la crisis comenzó con un ambicioso proyecto post-Copa Libertadores 2023, con fichajes estelares y el contrato de técnicos como Luis Fernando Suárez (mundialista), generó gastos desproporcionados sin resultados deportivos equivalentes. El club pasó de utilidades de $1.679 millones en 2023 a pérdidas de $3.318 millones, con deudas en salarios de hasta ocho meses y aportes a seguridad social pendientes. La nómina anual supera los $19.200 millones, y periodos sin ingresos agravaron el panorama.
En el semestre actual, el caos explotó, los jugadores entraron en paro desde octubre, ausentándose en duelos clave contra Águilas Doradas (derrota 5-1) y Deportivo Pasto (4-0), jugados con Sub-20. Esto selló su eliminación con 18 puntos en el puesto 16, sin chances de cuadrangulares. Además, el DT Rafael Dudamel renunció, y amenazas a la dirigencia aparecieron en carteles públicos (“Su familia o el equipo”). El Ministerio del Trabajo suspendió labores hasta certificar pagos, arriesgando la ficha profesional del club.
Hay luz al final
la Empresa de Energía de Pereira desembolsó un pago directo de su patrocinio pendiente a cuentas de jugadores y colaboradores, cubriendo honorarios y prestaciones adeudadas. Aguas y Aguas de Pereira completará otra quincena con fondos restantes, sin interferir en la administración (propiedad de Álvaro López). Estos aportes, gestionados esta semana, ya permiten abonar deudas y buscan revocar la sanción para los partidos finales contra Independiente Medellín y La Equidad.
Rendón enfatizó: “Estamos obligados a saldar estas deudas. Esta ayuda es un respiro para el equipo y la institución”. Acolfutpro y FPC vigilan el caso, pero el apoyo local evita un WO general (derrotas 3-0 por inactividad). Para 2026, el club planea reestructuración, aunque amenazas persisten.
El Pereira, campeón 2022 y cuartofinalista Libertadores 2023, busca no repetir el drama de otros clubes. Esta ayuda económica no solo salva el semestre, sino que inyecta esperanza a la hinchada matecaña.
